Lilia Beatriz Sánchez

Presidenta Sociedad Colombiana de Economistas

.-

Comentario con relación al editorial Dejémonos de vainas…

-

Cierto.

Solo agrego como complemento que seguimos teniendo la tasa de desempleo abierto más alta del continente. La segunda más alta tasa de pobreza de América Latina, después de Haití, que ya es mucho decir. Seguimos siendo un país con la más alta concentración de ingreso del Continente y la 5ª del mundo (lo dice Eduardo Sarmiento). Primer lugar en el mundo en colocación de minas antipersonales en nuestro territorio y primer lugar en víctimas antipersonales, que ya a los colombianos , que estamos saturados, nos parece normal.

No niego que hemos avanzado en muchos campos, pero ante los índices anteriores, todavía nos queda un trecho muy grande para nivelar la inequidad y la falta de igualdad de oportunidades, que debe comenzar por la democratización de la educación para todos: La pobreza, comienza también por la pobreza de mente.

Ciertamente, también hay que mirar el desempleo en las regiones: Popayán, Pereira, Manizales, Chocó, entre otras, que exhiben niveles casi superiores en 100% a la media nacional. Lo cual indica que también tenemos inequidad regional, gravísima: 52% del PIB centrado en Bogotá.

Como corolario final, personalmente no me queda duda, que todos los gobiernos han perdido la materia de generación de empleo, incluso el de Santos, aunque lo prefiero de lejos a Uribe, quien decididamente perdió la materia en ese aspecto.

De lejos, la pobreza es el peor de los males de un país, porque es de allí que se desprenden todos los males restantes. Y en la nuez de la pobreza, se encuentra nada más ni nada menos que el  empleo.

Para mí, que me especialicé en temas de empleo, por las mismas razones expuestas anteriormente, hay momentos que me entra una impaciencia total.   A estas alturas, año 2012, no existe una política de empleo para Colombia. No se oye por ninguna parte, y seguimos, muchos economistas entre ellos, creyendo que solamente con que crezca el PIB un poquito, crecerá solo el empleo, sin que se haga nada más. Esta teoría, ya se cayó a nivel mundial, y los economistas, mis colegas, no parecen darse cuenta: Ya estamos en la Sociedad del Conocimiento, que nos está moliendo todas las teorías sobre el tema. Pero seguimos sin querer darnos cuenta.