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La racionalidad política debiera llevar a los electores este próximo 25 de mayo a no votar por ninguno de los candidatos que representen las ideas neoliberales que sumen al país desde la noche de “Bienvenido al futuro”, dice el presidente de la Liga de Usuarios de Servicios Públicos Domiciliarios, Octavio Gil Gámez.
El dirigente social afirma que el decreto-ley 2981 del 2013, “le quita facultades a los alcaldes para el manejo de los servicios públicos (SP), y en su artículo 99, autoriza el COBRO DEL CARGO FIJO EN ASEO, y en el artículo 100 dio vía libre a la aplicación de la modalidad de PREPAGO en el cobro de los servicios públicos”.
La Liga expidió en las últimas horas el siguiente comunicado:
Crece la inconformidad de Usuarios de los Servicios Públicos.
Después de más de dos décadas de haber sometido a Colombia a las orientaciones del consenso de Washington, y con la pomposa frase de “Bienvenidos al futuro”, en lo que corresponde a los SERVICIOS PÚBLICOS, se feriaron las empresas estatales a menos precio y se privatizaron sus servicios convirtiéndolos en  mercancías que se prestan de mala calidad y cuyas tarifas han logrado que nuestros exiguos ingresos tengan cada día menos poder adquisitivo.
Continuando con este sometimiento, el decreto ley 2981 del 2013 le quita facultades a los alcaldes para el manejo de los SP, y en su artículo 99, autoriza el COBRO DEL CARGO FIJO EN ASEO, y en el artículo 100 dio vía libre a la aplicación de la modalidad de PREPAGO en el cobro de los servicios públicos.
EN GAS DOMICILIARIO la revisión técnica se cobra obteniendo una ganancia astronómica, capturando rentas de manera irregular, abusando de la posición  dominante y monopólica.
La VENTA DE AGUA en “bloque” anunciada por el Presidente Santos, es simple y llanamente un agresión a los bogotanos, un claro favorecimiento a los rentistas de la tierra (bancos), que terminarán la nefasta tarea de rellenar de concreto la Sabana de Bogotá.
En movilidad, el sistema de TRASMILENIO ya colapsó, y cualquier intento de remendar el sistema es inútil.  La solución es un sistema realmente integrado técnica y científicamente, que debe incluir el metro. El anuncio del cobro de peajes dentro de la ciudad es una carga adicional que no resuelve la angustia de los bogotanos.
En materia de BASURAS, el caso del relleno Doña Juana es alarmante puesto que ya está llegando a su capacidad máxima, y está sobre una falla geológica en el cinturón ambiental de Bogotá. Su manejo, que privilegia más el negocio que el bien común, traerá grandes costos y problemas para la comunidad.
Entre otros factores que alteran la calidad de vida de los colombianos está la GRAN MINERÍA, que destruye las fuentes hídricas y arrasa con la soberanía alimentaria del país. Los casos más conocidos son: Santurban, el páramo de Sumapaz y la desviación del Rio Ranchería, y no contento con lo anterior, el gobierno desconoce la consulta de Piedras y Doima Tolima.
Por ello, hoy es el momento propicio para proponer la reversión de estas políticas públicas contrarias al bien común. El primer paso que debemos dar es no apoyar en las próximas elecciones la reelección del presidente Santos, fiel continuador de las políticas que han desarrollado y  profundizado los últimos presidentes.
¡No debemos apoyar ninguna candidatura que patrocine las políticas neoliberales, que tanto sufrimiento ha traído a los colombianos!