LUÍS PÉREZ GUTIÉRREZ (Columnistas Libres)

EL VOTO EN BLANCO  PARA PRESIDENTE

.- El Voto en Blanco se presenta como una estrategia electoral contemporánea de inconformidad, de protesta, de lucidez, de inteligencia, de innovación y rechazo contra los grandes poderes tradicionales. En muchos países Voto en Blanco ha puesto en jaque a los gobiernos dominantes. En algunas alcaldías colombianas ha triunfado en elecciones democráticas el Voto en Blanco, y ha sido un suceso histórico.  No ha sido preocupación en Colombia que el Voto en Blanco logre perturbar unas elecciones presidenciales. No obstante hay un tufillo de Ola Blanca que necesita atención.

Es inexplicable el silencio que sobre la favorabilidad del Voto en Blanco se guardó al conocer los resultados de La Gran Encuesta de RCN Radio, RCN Televisión, La FM y SEMANA. En esa encuesta quien realmente ganaría la Presidencia de la República sería el Voto en Blanco y NO nuestro Presidente Santos.

Veamos los dos escenarios consultados. A la pregunta, si las elecciones para Presidente fueran hoy Usted por quién votaría.

Escenario UNO. Por JM Santos 24%. Por Clara López, 13%. Por Francisco  Santos 10%. Por el Voto en Blanco 25%. No sabe 14%. No votaría 14%.

Escenario DOS. Por Antonio Navarro12%. Por Oscar Iván Zuluaga 7%. Voto en blanco 25%. No sabe por quién votar 14%. No votaría 18%.

Para marcar como irrelevante el Voto en Blanco, fue colocado en el CUARTO puesto en lugar de PRIMERO. Es una estrategia timadora. Es engañoso para la ciudadanía y para el mismo Presidente Santos, esconder la tesis de esa encuesta de que quien ganaría la campaña presidencial es el Voto en Blanco y no Nuestro Presidente. Lo que indica esa gran encuesta nacional no es nada más ni nada menos que la Presidencia podría quedar NULA por el triunfo del Voto en Blanco. “VOTO EN BLANCO” tiene la mayor intención de voto sobre todos los candidatos. Pero además, ese otro 18% de ciudadanos que pueden votar y que dicen que no votarían son en general por escepticismo y porque no creen en las elecciones; si a ese 18% de colombianos que no votan les propusieran una alternativa electoral de protesta de Voto en Blanco, habría una alta probabilidad de éxito de unirlos a la Ola Blanca. La Ola Blanca aumentaría al 43%. Y aún más, hay otro 14% de ciudadanos que contestan que no saben por quién votar, esos tendrían también una gran tendencia a ser enlazados por la Ola Blanca del Voto en Blanco. Y si el Polo y otros movimientos cercanos ven probabilidades de éxito del Voto en Blanco, no dudarían en apoyarlo para derrotar al Presidente Santos.

No se le puede ocultar a Nuestro Presidente ni a sus asesores el riesgo de la Ola Blanca. Deben entender que hay cosas para cambiar con urgencia. La sintonía de Nuestro Presidente Santos con la ciudadanía y con las Regiones requiere un ajuste radical.

 

Si la gran encuesta de los más poderosos de Colombia está bien hecha, quién ganaría sobrada hoy la Presidencia sería el Voto en Blanco.

 

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LA DECADA PERDIDA DE LA EDUCACION SUPERIOR

 

.- Los Gobiernos magnifican sus pequeños logros para hacer creer que son los mejores de la historia. La supervivencia de un gobierno  se basa en vender la ilusión de la percepción si no hay resultados ciertos. A los colombianos nos vienen embobando con la tesis que tenemos una educación de Excelencia. Y se repite un millón de veces para convertir esa mentira en verdad. No es así.

La Educación Superior en Colombia vive una década de rezago, diez años perdidos. Y si la educación pierde, pierde Colombia.

En los últimos 10 años, 3.2 millones de jóvenes bachilleres se han quedado por fuera de la educación superior. Y nunca jamás vuelven a estudiar. Así no se está haciendo Patria.

En Colombia hay 282 Instituciones de Educación Superior (IES) que desde hace más de 15 años les está el Ministerio de Educación pidiendo que hagan la Acreditación Institucional. Quince años después, solo 25 de 282 instituciones de Educación superior se han acreditado. En Bogotá 8, en Antioquia 6, en el Valle 5. Solo el 8.8% de las Entidades de Educación Superior están acreditadas. Cómo puede hacerse un país competitivo con una educación superior vetusta o atrasada o sin capacidad de competir. Si la Educación superior no da ejemplo de Calidad qué se puede decir de la Primaria y la Secundaria.

El Gobierno invierte millonarias sumas en las instituciones de Educación Superior. De todas ellas, solo 8 IES públicas han logrado la Acreditación Institucional. Es una vergüenza que el Sector Público no de ejemplo de calidad. Es una mediocridad inaceptable. Entidad Pública que no se Acredite es muestra de un gobierno débil, es un mensaje que el Gobierno no se interesa en la educación.

De otro lado,  es obligatorio acreditar individualmente los Programas de Pregrado que ofrecen las IES. Empezando 2013, en Colombia se ofrecen 6.258 programas de pregrado. Solo el 12% de los programas de pregrado han sido acreditados, solo 761 acreditados. El 80% de los programas que se ofrecen en el país no han sido acreditados. 15 años perdidos. Es probable que estén engañando a los ciudadanos con los altos costos de matriculas y una calidad cuestionada. Hay 181 Instituciones de Educación superior que no tienen NI siquiera un solo programa acreditado ante el Consejo Nacional de Acreditación.

Y obsérvese esto, más que escandaloso. De todos los programas de Posgrado que se ofrecen en Colombia, solo 21 están acreditados. Antioquia 14, Bogotá 6 y Pereira 1. Es una vergüenza para Colombia.

Por mucho que se venda la ilusión de que hemos avanzado en educación, los indicadores desnudan la verdad y muestran un país con una educación fosilizada.