LA PAZ, UN PROPÓSITO NACIONAL

La chispa de la vida

Análisis REDGES

Octavio Quintero

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Necesitamos un propósito nacional que desarme los espíritus y complemente el proceso de paz suscrito con las Farc-Ep que desmovilizó la guerrilla alzada en armas 50 años atrás.

A poco echar a andar el proceso que llamamos ‘posconflicto´, nos vamos notificando que desarmar un espíritu alevoso es más difícil que desarmar todo un batallón de insurgentes.

Llevamos dos años y medio discutiendo cómo desarrollar de la mejor manera el acuerdo final de paz, y ya sabemos que no es fácil. Este obstáculo que parece desalentador, resulta sorprendentemente grato porque viene fortaleciendo la tenacidad de los esfuerzos emprendidos por personas y empresas decididas a sembrar convivencia en medio de las diferencias que nos pueblan como sociedad.

Convivir y discutir la mejor manera de preservar la paz, es lo que distingue a las sociedades civilizadas. En forma más cruda: no tenemos que matarnos para zanjar nuestras diferencias.

En este propósito nacional de desarmar los espíritus, se convoca para el próximo lunes 12 de agosto, en el Salón de Gobernadores de la Gobernación de Cundinamarca, desde las 9 de la mañana, el primer foro denominado “Proceso de paz en Colombia y fortalecimiento de la democracia”, bajo el auspicio de la ONG, Colswaden, moderado por el ex Alto Comisionado de Paz, Víctor G. Ricardo, con la dirección general del reconocido abogado-periodista, Fabio Becerra Ruiz.