DE RUMBA EN RUMBA Y SIN EMPLEO

La generación de empleo, aparte de las expectativas económicas, es lo que más se espera de la acelerada industrialización de Tocancipá y Gachancipá, los dos municipios más definidos en esta nueva ola de conquista empresarial a Sabana Centro.

En Tocancipá ya hay muchas importantes empresas por las que uno pudiera preguntar cuánto empleo le están generando a los raizales del municipio. Hay tantas que esta población debiera tener pleno empleo, y no es así.

En Gachancipá pasa lo mismo. El propio alcalde denunció hace unos meses, y debe seguir siendo válido, que Protisa decidió salir de los empleados de este municipio como represalia a un litigio de impuestos que emprendió a finales de la pasada administración.

La gente cree que las empresas que llegan a la zona están obligadas a darle empleo, y que si no lo están haciendo, es culpa de los alcaldes. Esto es parcialmente cierto porque, en efecto, es por culpa de los alcaldes que no manejan unas buenas relaciones sociales de interés general con esas empresas.

Hay leyes y normas que las empresas venidas a la zona están violando, y los alcaldes y personeros a lo mejor ni saben, y si lo saben, se hacen los bobos…

Por ejemplo, en el caso de Protisa, hubo una discriminación laboral de orden geográfico, y  no se supo nada sobre alguna acción que en orden a corregir el abuso se hubiera emprendido por parte de la primera autoridad…

Y en Tocancipá, una empresa temporal, de nombre NASES, contratada por la firma QUALA, está ejerciendo también discriminación laboral, en razón de la edad. El psicólogo de dicha temporal no tiene empacho en decir a las mujeres mayores de 32 años que su hoja de vida es muy buena pero que por la edad no clasifican.

Los alcaldes debieran preocuparse más por el día a día de la gente que por vivir armándoles rumbas de una noche…