CON LOS BRAZOS CRUZADOS (III)
X-Octavio Quintero
(Director/El Satélite)
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He sido víctima durante 20 días (hasta hoy lunes 07 de junio) de una mala mercancía (un PC marca Lenovo) adquirido en el Éxito de Fusagasugá el 30 de abril, y devuelto el 19 de mayo por defecto de fábrica.
El PC es mi herramienta de trabajo, como debe ser para millones de colombianos que usan el computador en distintas labores cotidianas que constituyen, también en muchos casos, su única fuente de ingresos. Y estoy seguro, por demás, que no soy el primero ni el único que ha sido víctima de un asunto parecido al caso mío.
En síntesis: los consumidores colombianos estamos siendo atropellados en gran medida por empresas fabricantes y sus proveedores de artículos que adquirimos permanentemente en almacenes como el Éxito.
Yo creía, como deben creer casi todos, que adquirir una mercancía en estos centros comerciales era sinónimo de garantía, y que, en caso de que le resultara defectuosa, no era sino volver y cambiarla de inmediato por otra en perfectas condiciones.
Sorpresas te da la vida. Cuando el pasado 19 de mayo me presenté con mi PC Lenovo, y se comprobó la falla, en vez de reponerme uno nuevo, procedieron a referenciarlo y notificarme que el Éxito no era responsable del funcionamiento del equipo, y que todo lo que podían hacer era enviarlo al productor para que lo revisara, tomándose un tiempo de 1 a 30 días… Hoy lunes, completo 20 de brazos cruzados.
Este tema tiene mucha cola para un largo blablablá. Por eso hay que cortarlo por lo más sustancioso.
1. Yo compré un computador nuevo, y por lo que se me ha dicho, lo están reparando por una falla que no fue fruto del uso ni del abuso mío. O sea que ahora me van a dar un computador de segunda a precio de nuevo.
2. He mirado por encima el Código de Defensa del Consumidor en donde se establece que la responsabilidad con el cliente es un asunto solidario entre el productor, el proveedor y el prestador del servicio. ¿Por qué el Éxito esconde el bulto en tales casos?
3. En un país tan complicado para todo como el nuestro, especialmente tan congestionado judicialmente, debería encontrarse alguna forma que obligue a los fabricantes, proveedores o prestadores del servicio a resolver de inmediato los reclamos del cliente, especialmente cuando se trate de mercancías consideradas herramientas de trabajo, materias primas o de uso doméstico cotidiano, sin tener que someterse a largas colas en los estrados judiciales. Por ejemplo, en esta era digital, así como se aplica en provecho del tránsito la foto-multa, también la denuncia electrónica está pidiendo pista.
4. ¿Qué tanta falta le hace a Lenovo (en este caso) un computador menos, para que no le reponga al cliente de inmediato un computador bueno que a él sí le está haciendo mucha falta?
Estos casos, que se cuentan por millones de veces cotidianas en nuestro país, son tratados generalmente dentro de un sistemático abuso a los consumidores en donde, como reza el adagio, lo que se aplica es la ley del embudo: lo ancho para ellos y lo estrecho para nosotros.
