TODO PATAS ARRIBA
20.03.2019 08:06¡Hágase la luz!
“En el principio creó Dios los cielos y la tierra. Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía por encima de las aguas. Y dijo Dios: Hágase la luz; y la luz se hizo (Genesis 1:3–5).
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Análisis REDGES
¿Se merece un país con tantos problemas sociales como Colombia que el Presidente lo haya metido, innecesariamente, en semejante berenjenal político-jurídico, como el que desataron las objeciones de Duque a la ley estatutaria de la jurisdicción especial para la paz, resquebrajando, de paso, en el campo internacional, la imagen de país respetuoso del orden institucional jurídico-democrático establecido?
Que cada cual haga su reflexión. De momento la foto que se refleja en el cuadro es un descomunal choque de trenes: un presidente objetando lo inobjetable; una Corte dispuesta a contestar lo incontestable; un Senado desafiando a la Corte y una Cámara desafiando al Presidente. ¿Quo vadis Duque?
Al margen de dicho enfrentamiento institucional se suceden y desbordan los problemas sociales: la educación superior y su desfinanciamiento; la educación pública y sus protestas laborales, las protestas de las comunidades indígenas y las penurias de las comunidades asentadas en las zonas de conflicto azotadas, además, por inclemencias naturales; el abandono de los campesinos y su labor alimenticia; el recrudecimiento de la violencia y el exterminio selectivo de los líderes sociales; la corrupción campea y permea los espacios más insólitos y, todo eso, por si fuera poco, en medio de un debate electoral de tipo regional en el que los políticos fuerzan a sus prosélitos, lícita e ilícitamente, a mantener el estatus quo de un establecimiento que prodiga favores a los elegidos a costa de los electores.
Los días son oscuros… ¿Qué tal ese otro debate armado en las toldas de la oposición? Nos lo pintan los medios de información como una pataleta de Petro que quería salir en una foto. Pero, en el fondo de esa foto, hay un espíritu burlón que entre las sombras se ríe: el régimen.
No vayan a creer que esos 8 millones de votos de Petro en las pasadas elecciones no asustaron y asustan todavía al establishment; y posteriormente los 12 millones de votos contra la corrupción, más. Ambos resultados, el régimen tiene que diluirlos, si quiere seguir reinando.
De momento, la pataleta de Claudia López en defensa de su consulta contra la corrupción ya pasó. Ahora está enfocada en llegar a la alcaldía de Bogotá y, es mejor, que con el régimen se haga pasito. Ahí va alcanzando el tono, bien asistida por el simbolismo de Mockus y la tibieza de Fajardo de quien se dijo que le habría dicho a Claudia que todo con ella, pero con Petro, ni pío. Los medios no profundizaron la versión a ver qué tan cierta era, pero ni falta que hace.
El incontrolable sigue siendo Petro: es la amenaza más seria que enfrenta el régimen, después de la osadía de Gómez Hurtado de convocar a la sociedad a tumbarlo. A Petro hay que neutralizarlo: es el único que habla de lo que, desde los tiempos de Gaviria, no se puede tocar: el modelo neoliberal, vivito y coleando, 28 años después, en el Plan de Desarrollo de Duque…
Y ese es el fondo de la foto. No es ninguna pataleta. Es que a Petro le quitaron su derecho a ser el jefe de la oposición, a título de excandidato presidencial derrotado por el candidato triunfador. Es lo que dice la Constitución después de la reforma convenida en los acuerdos de paz con las Farc-Ep. Se argumenta que no todos esos 8 millones de votos son de Petro, cierto, pero no todos los 10 millones que eligieron a Duque son de Duque y, sin embargo, él es el Presidente. La misma premisa valdría para Petro. Pero no: el que parte y reparte, siempre se queda con la mejor parte.
¿A dónde va todo? El régimen es tan obvio que no es difícil adivinar sus pasos. Como Petro ya derrotó al tibio de Fajardo, no se puede correr el riesgo de que lo derrote otra vez en las elecciones del 2022. Hay que fabricarle a la opinión pública a través de los medios, que en eso son únicos, otra figura: una figura joven, inteligente, bonita, carismática y mujer, que es la tendencia. Esa es, … Juanita Goebertus: ¡Eureka!
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