Pullas por votos

Todo lo que haga o diga, o no haga ni diga hoy el presidente Santos, podría ser tomado como parte de su estrategia hacia la reelección.

En efecto, los analistas hallaron curioso que el Presidente, sin más ni más, hubiera colocado tan acertada banderilla en todo el morrillo del Procurador Ordoñez cuando dice:

"los principios arraigados en la conciencia no deben impedirnos contemplar y respetar las ideas y las convicciones ajenas".

Si el presidente Santos hubiera dicho esto mismo antes de la elección, quizás este “gallo” de la Procuraduría, hubiera sido reemplazado por una “gallina”, que era la candidata de Santos y a la que dejó virtualmente sola en la recta final de la campaña.

Curioso, por decir lo menos, que ahora el Presidente descubra que el santurrón de Ordoñez deja filtrar en su espaciosa conciencia jurídica elementos de su credo con los que juzga y condena las ideas y las convicciones ajenas.

-

¿Quién dijo miedo?

Y, al parecer, siguiéndole el juego al Presidente, el procurador Ordoñez se sacó la pulla de Santos al considerarse una víctima propicia del “bullying mediático” mediante el cual, sus contradictores (¿el Presidente Santos entre ellos?) intentan “apocar, reducir, aplanar, amedrentar, excluir socialmente e intimidar emocional e intelectualmente a la víctima”.

Y no se quedó en eso. Directamente, a renglón seguido, el Procurador le advierte a Santos: “Presidente, estaré muy vigilante de los acuerdos a los que se llegue en La Habana”.

En términos electorales, y teniendo ya el Procurador su puesto asegurado, lo que probablemente se busca ahora es convertir en votos a favor de Santos el abierto malestar que en un amplio margen de la sociedad capitaliza el discutido Procurador.