LA RIQUEZA QUE GENERA POBREZA

02.07.2019 08:17

 

Política y seguridad urbana

Las ciudades caribeñas, propensas a la corrupción política y el incremento de grupos delincuenciales

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Jorge Vergara Carbó
Edición: REDGES
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Las más recientes cifras del DANE sobre desempleo e informalidad laboral, proyectadas sobre las capitales de la región Caribe, confirman que la explotación minera no es el modelo de desarrollo social.
La región Caribe, siendo rica en carbón, gas, níquel y otros minerales, es una región pobre, cuya gente vive del rebusque… De ahí la gran cantidad de personas ganándose el sustento con el mototaxismo, ventas ambulantes, prostitución, que se convierten fácilmente en carne de cañón para políticos y grupos delincuenciales. Estos grupos son carnada fácil de grupos políticos que detentan el poder y grupos delincuenciales que atraen a los más jóvenes con dinero y drogas.
Los candidatos políticos serios, que también los hay en la región, debieran llamar la atención sobre este tema específico del desempleo y la informalidad, buscando cambiar el enfoque económico extractivista por un modelo sostenible y sustentable con el medio ambiente y el desarrollo social.
 
Análisis nacional
El desempleo a nivel nacional en el país, no ha bajado de dos dígitos en lo corrido del año 2019. Para el mes de mayo marca 10.5%, tasa superior a la de mayo del 2018, que fue de 9.7%, es decir 0.8 puntos por encima. De haberse mantenido la Tasa Global de participación (TGP) igual a la de mayo del 2018 (64.1%), la tasa de desempleo registrada sería de alrededor del 12%, ya que la TGP disminuyó un punto (64.1-63.1), por lo mismo, la tasa de ocupación (TO) disminuyó 1.5 puntos, al pasar de 57.9% a 56.4%.
La informalidad a nivel nacional (13 ciudades y AM), sigue siendo alta (46.5%), a pesar de haber disminuido un punto con relación al mes de abril del año pasado. Pero el desempleo fue para el mes de mayo de este año del 11.2%, 0.7 puntos por encima del nivel nacional.
Los desocupados en el país a nivel nacional fueron 2’611.000 personas, y en las trece ciudades y Área Metropolitana fueron 1’369.000 personas, lo que representa que el 52.4% de los desocupados, están en las 13 ciudades principales del país con sus áreas metropolitanas.
El desempleo en Barranquilla sigue siendo de los más bajos del país para el período febrero-abril/2019, ubicándose en el 8.0%, inferior al registrado en el mismo periodo del año pasado, que fue del 8.3%, es decir, disminuyó 0.3 puntos, lo que disminuyó los desocupados de 81.000 a 79.000, es decir, 2.000 barranquilleros encontraron empleo, que puede explicarse en parte por los carnavales de la ciudad que fueron en el mes de marzo, y el aumento de los inactivos que fue de 5.000.
Cartagena sigue presentando un índice de desempleo bajo (7.5%), debido a su baja participación en la TGP (55.2%), cuando la media nacional es del 65.9%. Lo que significa que los cartageneros se cansaron de buscar trabajo. Es una tasa mentirosa de lo que es en realidad la ciudad en materia de actividad económica. Porque, incluso, tiene la tasa más baja de informalidad en la Región Caribe (50.8%).
 
Informalidad en la región
Las siete ciudades de la región Caribe, presentaron la siguiente situación en materia de informalidad y desempleo:
Ciudades             Inf.%             TGP%         TD%
Barranquilla       56.0                64.7              8.3
Cartagena           50.8                55.2              7.5
Montería            57.5                63.0            11.9
Riohacha             64.0                61.3            15.3
Santa Marta       63.3                61.1            11.3
Sincelejo             64.9                67.0            10.5
Valledupar          59.1                61.2            16.4
Nacional             46.5                65.9            11.9
 
Estas cifras contrastan con los resultados de las principales ciudades del país, ya que la informalidad en el trabajo es menor, incluso, que la media nacional (46,5%). En Bogotá es del 41.1%; en Manizales, 40.4%; en Medellín, 42.9%; en Cali, 45.8%. Solo Bucaramanga presenta el 53% y Pereira el 49.6%.
Llama la atención, y confirma, que la explotación minera no es altamente generadora de empleo, lo que incrementa la informalidad, como es el caso de Riohacha con niveles del 64.0%, Valledupar con el 59.1% y Montería con el 57.5%.
Esos resultados demuestran claramente que la región Caribe, siendo rica en carbón, gas, níquel y otros minerales, es una región pobre, cuya gente vive del rebusque… De ahí la gran cantidad de personas ganándose el sustento con el mototaxismo, ventas ambulantes, prostitución, que se convierten fácilmente en carne de cañón para políticos y grupos delincuenciales.
Está demostrado que quienes viven del rebusque no alcanzan a devengar un salario mínimo, y mucho menos cotizar para pensión y salud… Viven ‘sisbenizados’, convirtiéndose en carnada para los grupos políticos que detentan el poder, ya que se valen de la miseria de la gente para obligarlos a votar por sus candidatos, so pena de sacarlos del Sisbén. Eso significa perder subsidios como: adulto mayor, madre cabeza de familia, vivienda gratuita, beca universitaria y otros.
El poco empleo formal que se da en la región, es de bajo salario, ya que la industria cada día pierde más importancia ante el comercio, incluso, en Barranquilla, donde el empleo generado (94%), corresponde a empleados particulares (41.1%), trabajadores por cuenta propia (46.6%), empleo doméstico (3.7%) y trabajador sin remuneración (2.6%).
Si eso es en Barranquilla, imagínense como será en el resto de la región Caribe.
Esa es la realidad del país, y en especial de la región Caribe donde, incluso, ya varios medios de comunicación afirman que se están armando nuevamente grupos paramilitares incrementando la inseguridad, con las secuelas que trae consigo.
Esperamos que los distintos candidatos a corporaciones públicas en la región Caribe, aborden estos temas con propuestas serias y creíbles para disminuir el desempleo, la informalidad laboral, la inseguridad y la corrupción.
 
 

 

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