EN BUSCA DE IMPUESTOS
08.09.2014 15:59
El alcabalero exministro, Juan Camilo Restrepo, le sugiere al gobierno nacional la posibilidad de incrementar el IVA en vista de que el mantenimiento del 4x1.000 y del impuesto al patrimonio no le alcanza para financiar un faltante en el presupuesto del año entrante estimado en 12,5 billones de pesos.
Lo del exministro es cierto, y es más: tal como se analizó recientemente en esta misma columna, el requerimiento de mayores ingresos para lo estimado en el presupuesto del 2015 podría estar cerca de los 24 billones de pesos.
Pero el asunto no es, como se ha venido haciendo en los últimos años, apretando más a los ya ahorcados contribuyentes de siempre a través de impuestos indirectos que caen indiscriminadamente sobre todo el mundo, independiente de su capacidad de pago… Eso no es equitativo, ni tampoco mantener injustas contribuciones parafiscales, como ese descuento del 12 por ciento para salud que les hacen a las mesadas de los pensionados.
Todos los que de alguna manera se hayan acercado a la estructura tributaria del país saben que el gran hueco está en dos frentes: la evasión y el contrabando que, entre las dos, suman arriba de 50 billones de pesos.
Váyase por ese lado y de seguro al gobierno le sobrará plata hasta para tirar ‘pa’arriba’, no a manera de falsas expectativas políticas en tiempos electorales, sino de verdad-verdad en tantos programas sociales que andan a la espera de una piadosa asignación presupuestal que no llega porque lo poquito que sobra, o lo que se rapa por ahí de otros programas, se ahoga en el mar de las mermeladas con las que el gobierno soborna la actividad legislativa nacional, siempre en favor de los menos necesitados.
A propósito
El corresponsal de El Satélite, rupertohand@gmail.com, nos hizo llegar lo que en periodismo llamos “chiva” pero que en realidad es una marranada…
¿Dónde está la DIAN?, se pregunta el corresponsal y se le podría responder que el último director de este organismo, Juan Ricardo Ortega, le tocó salir apresuradamente del país porque lo iban a matar, obviamente, los contrabandistas y evasores de impuestos.
Pero siguiendo con la “chiva”, el corresponsal revela que mensualmente entran de Venezuela más de 8.000 cerdos que abastecen la demanda de la costa Caribe, Norte de Santander, Arauca y el centro del país: Boyacá, Cundinamarca y Bogotá.
Y a esto agréguele del mismo país el contrabando de gasolina, café, productos lácteos y agrícolas de todo orden. “Hasta contrabando de transfusiones de sangre se pasa de contrabando de Venezuela a Colombia”, afirma Ruperto Hand.
Otra ‘locamotora’ desengranada
Las locomotoras de Santos parecen carros chocones en parque de diversiones: anduvieron al garete en el cuatrienio pasado, la vivienda, el agro, la minería y la innovación, y ahora, en el segundo mandato, se suelta la locomotora de la infraestructura vial más loca que sus predecesoras.
El consuetudinario analista económico, Eduardo Sarmiento, en su columna de El Espectador, dice que la inversión vial solo “tiene una pequeña participación en el PIB y se caracteriza por la baja productividad y la escasa generación de empleo”, lo que anticipa su fracaso en lo social; y en lo económico también: “las obras acaban siendo realizadas por el Estado en forma directa o por el sector privado con cuantiosos subsidios”.
Y eso no es lo peor…
Lo perversamente escondido en esta ‘locamotora’ vial es que se proponga volver a la mala práctica de garantizarles a los contratistas una demanda mínima que rompe el principio básico de la licitación pública; con cara gana el concesionario y con sello también.
Son temas que no se ventilan mucho en la prensa nacional; pero si alguien quiere saber la verdad, basta con averiguar cuánto le giró el Estado al banquero Luis Carlos Sarmiento Angulo en las concesiones de primera y segunda generación que contemplaban el paso mínimo de vehículos por los peajes y, si no se copaba la meta, el Estado cubría el faltante…
Como en las leyes de Murphy, en Colombia podría decirse que no hay mal gobierno en pasada administración que no sea susceptible de empeorar en la administración siguiente.
Vea la columna de Sarmiento en este enlace que le proporciona EL SATÉLITE.
CLARA LÓPEZ RINDE CUENTAS
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