Versión/Grupo Editorial El Satélite

(Fuente: EFE/El Mundo, de Medellín)

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La implementación del proceso de posconflicto en Colombia durante una década tendrá un costo estimado de 31.000 millones de dólares (unos 9,3 billones de pesos), según reveló Julián Hottinger, experto suizo en resolución de conflictos, quien participó en las negociaciones del acuerdo de paz.

“Es una cifra descomunal y obviamente no podrá ser asumida por un solo país. Habrá que ver cómo se reparte”, dijo el experto en un  encuentro con la prensa, ayer, jueves 22, en Berna.

Hottinger dijo estar satisfecho del acuerdo. “Hay dos aspectos, el contenido y el espíritu de la negociación. El espíritu ha sido positivo, estaba claro al cien por cien el nivel de voluntad de acabar con el conflicto. Con respecto al contenido, es el resultado de un compromiso y es realizable. Soy optimista, habrá altos y bajos, pero soy optimista”, subrayó.

El diplomático suizo también se mostró optimista frente al futuro, aunque a la vez muy cauto, dados los enormes desafíos que enfrentan los colombianos para implementarlo y, especialmente, el aspecto financiero.

Apoyo de Suiza

Consultado sobre cuál será la contribución de Suiza, respondió la directora de la división de la Seguridad Humana, Heidi Grau, quien dijo que el compromiso financiero inicial -a ser ratificado por el Parlamento- es de cien millones de francos suizos (103 millones de dólares) entre 2017 y 2020.

La identidad, un vacío

Hottinger explicó que el proceso no fue fácil, que había diferencias de lenguaje entre las partes, como el hecho de lo que implicaba “dejación de las armas. Pero el objetivo, que era el de conseguir un acuerdo, siempre se mantuvo.

Con respecto a lo acordado, el diplomático repitió que los desafíos son inmensos, incluido algo tan importante como el hecho de que sólo se conozca la identidad real de 3.000 de los 16.000 supuestos miembros de las Farc y que del resto sólo se sepa el pseudónimo guerrillero. “La identidad es esencial para el proceso de reintegración”, aseguró.

En relación a este aspecto, el diplomático se mostró cauto al decir que en algunos casos será fácil, pero en otros costará mucho.

Subrayó que un aspecto esencial es el de la reconciliación tras los procesos judiciales que deben llevarse a cabo, “pero nadie sabe cuántos serán”.