Dulcinea: una población al borde de la locura
10.11.2012 23:34
Top Tex y Cía, han hecho la vida imposible a varias familias en Dulcinea, un centro poblado de Tocancipá en el corazón de la zona industrial.
Su apacible desarrollo social se ha convertido en un suplicio auditivo, tras la instalación de Top Tex y otras empresas en sus vecindades, pues, el ruido provocado por la operación de sus plantas, o los malos olores generados por el proceso de sus productos industriales, sobrepasa los niveles máximos permitidos por la autoridad ambiental.
En efecto, la CAR en 2010 intervino a Top Tex por varios aspectos, entre otros, por el ruido de sus plantas y el respectivo informe concluye que están por encima de la norma, 76 decibeles máximos permitidos.
En ese entonces, la CAR le fijo un plazo de tres meses a la empresa para que ajustara sus ruidos pero, al parecer, Top Tex puso oídos sordos a la disposición de la autoridad ambiental.
El dirigente comunal, Abdenago Aguilar, ha vuelto a encauzar el malestar de la comunidad, y el próximo jueves, a las 7 de la mañana, se desarrollará en el Concejo Municipal una sesión especial sobre el asunto, con participación de las partes.
Aguilar dijo a El Satélite que la audiencia citada por el Concejo servirá para demostrar que él no está presionando a nadie sino defendiendo el derecho de una comunidad a tener una vida digna, empezando por su propia residencia levantada con su propio esfuerzo, antes de que llegaran los colonizadores industriales al territorio de Dulcinea.
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