Octavio Quintero

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La aclamada abogada y columnista, Cecilia Orozco Tascón, @CeciliaOrozcoT, pregunta: “¿La @CConstitucional interviniendo en política? Cada vez hay más sospechas de que ese pecado capital está presente en el tribunal árbitro del Estado de Derecho. Si eso se confirma, sería una de las más graves señales de que el sistema democrático tambalea en Colombia”. El trino, retumba en la red social X, con centenares de respuestas, casi todas asintiendo, acotando ejemplos, no solo de la politización de la CC, sino de las demás: la Suprema y el Consejo de Estado, en general, todo el sistema judicial, con marcado énfasis en el Gobierno del Cambio. Si a eso se le agrega la Fiscalía de Barbosa y la Procuraduría de Cabello, apague y vámanos... Estamos recordando los 25 años del asesinato de Jaime Garzón, quien marcó su tajante y fino humor denunciando la corrupción en la justicia y la política, y hace 30 años, otro ilustre dijo: “Hemos llegado a una situación escandalosamente paradójica en la que nuestro sistema de justicia parece estarse pasando al bando de los criminales”: Álvaro Gómez Hurtado, también asesinado: ¿Raro, no? Citan el caso Uribe, sobre el que –dicen-- que está a punto de precluir por vencimiento de términos, porque la CSJ “se negó a nombrar fiscal durante meses”, afirma el periodista Daniel Mendoza (@ElQueLosDELATA).

Si ocurre –opinó yo—, y todo apunta hacia allá, la administración de justicia se revienta; todo el sistema vuela en pedazos y no habría una razón suficiente para no convocar una constituyente, exigiendo una reforma aséptica al sistema judicial. La cooptación de la institucionalidad del Estado por mafias asociadas al narcotráfico dominan los comentarios del trino mencionado. Eso evidencia que el estatus quo, la llamada “gente bien”, está habituada a la corrupción, que es el volante de inercia que marca la dirección de una sociedad a la perdición. Por eso el diagnóstico de la abogada y columnista, Cecilia Orozco, es dramática: “El sistema democrático tambalea"... La prescripción sería: constituyente ¡YA!