Una pregunta suelta a la ministra de Educación, Gina Parodi

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Jaime Colpas Gutiérrez*

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Este desenlace final de la pugna (desde el 17 de septiembre del 2012) por el remplazo de la ex rectora Dra. Ana Sofía Mesa de Cuervo al ‘blindarse sus derechos pensionales’ y al ser designado, “sorpresivamente”, como rector encargado (desde el 8 de septiembre de 2014), el Mg. Rafael Castillo por el voto unánime de ocho consejeros, nos lleva a preguntarnos: ¿Cuál será el Porvenir de Uniatlántico?

Después de la salida de la  ‘controvertida rectora’ que rectoró con el respaldo de la nación y que llegó para sanear a “la inviable institución, declarada en cuidados intensivos por la ley de quiebra 550”, votada durante la administración del gobernador Rodado Noriega por vigencia de ocho años, (4 de marzo de 2005).  La que tenía su peor crisis administrativa, académica, financiera y ética desde su fundación por el filósofo Julio Enrique Blanco de la Rosa en junio de 1946, que, fue creada para ser el faro iluminador del desarrollo de Departamento del Atlántico y como la escuela de dirigentes probos y comprometidos con su progreso académico, social, cultural y científico.

¿Qué porvenir nos espera ahora, profesor Colpas?-, nos pregunta el destacado físico y académico Dr. Jorge Navarro con tono de preocupación por “los vientos de repolitización que se ‘avecinan’ y porque la saliente rectora modificó el acuerdo de reestructuración de pasivos por un escenario financiero lleno de nubarrones, prolongando la ley 550 hasta el 16 de agosto del año de 2020 por ¡seis años más! (SOS), ya que por sentencias laborales se deberán pagar $26.177.710.211 y por procesos laborales en curso en contra de la institución la suma de $37.3000.972.009.0, (Cláusula 1, véase: ww.uniatantico.edu.co)”,  como si nosotros fuéramos futurólogos.

Bueno, por mi conocimiento de más de 27 años en el timón de la docencia investigativa y liderazgo institucional, podemos tener hipotéticamente un porvenir de ‘cal o arena’ como en otroras tiempos de tres lustros atrás cuando estuvimos a punto de colapsar por las múltiples crisis en la que el modelo débil de rectores encargados que actuaron como títeres de los varones políticos y sus agentes internos, quienes esquilmaron clientelista y politiqueramente de manera desenfrenada los intereses y arcas institucionales, que, se aletargó en un arroyo borrascoso, hasta el punto de que llegó a ser declarada como la empresa más quebrada del país por la revista Semana en 1999.

O sin embargo que si por fin: ¡despegaremos! hacia un porvenir  humanístico y próspero con modernización institucional y autonomía académica acorde con los tiempos de la competitividad del siglo XXI, por lo que se deberá superar los crasos errores de la administración saliente y preservar sus buenos ladrillos y fortalezas de un periodo interesante en que la Universidad pasó de 12.611 a 20.000 actualmente, entre pregrado y posgrado, contando con 14 especializaciones, 7 maestrías y 2 doctorados, tiene 49 grupos reconocidos por la última convocatoria de Colciencias, de los cuales el 80 % está en  C y D, 3 en B, 5 en A y 1 en A1. 9 fueron reconocidos y 40 perdieron el reconocimiento en la medición de 2013. Se acreditaron cinco programas de calidad y nos preparamos a ingresar en la era de la reacreditación de historia y licenciatura musical en el 2015.

Dr. Gina Parody, para que Uniatlántico ingrese a la era del ‘porvenir próspero y humanístico’ que sonroje las almas inmortales de Julio E. Blanco, el humanista Alberto Assa y José Consuegra Higgins y demás fundadores, así como la de cientos de académicos y miles de profesionales e investigadores en formación, egresados con sentido de pertenecía  y la ciudadanía doliente que nos ha rodeado en las dos flagelantes décadas de crisis y recuperación dolorosa, amenazada por los coletazos de la vieja universidad que aún se ilusiona con el sumo de ‘la jugosa mermelada’, por lo cual deberá coadyuvar a erradicar las dos  patologías que gestaron la crisis misional, de gobernabilidad, ética, institucionalidad, responsabilidad social y academia, así:

Por un lado. Usted no puede permitir que desde el Consejo Superior se reviva el fracasado modelo de “rectores encargados” que hizo que perdiéramos una década valiosa y nos rezagáramos (observe nuestros indicadores nacionales e internacionales) con su inviabilidad institucional, por lo que este encargo transitorio: no puede pasar de tres meses contados, permitiendo el libre fuego y la trasparencia en la escogencia de un Rector como  expresión de la Gobernanza, Espíritu Crítico y Democracia Universitaria, debido a que: “Universidad que se respete, -‘como centro del saber, desarrollo humano, reflexión y autonomía-, debe tener en su Rectoría a una figura académica de la ciencia, cultura y humanismo, (Véase, Colpas Gutiérrez, La Libertad, 20 de febrero de 2014)”; pero escogido como usted lo manifestó por Meritocracia.

Por otro lado, DR. Parody. Usted,  nos debe dar una explicación y exigírsela a su vez al Ministerio de Hacienda de ¿por qué se prorrogó la ley 550 por seis años más?, y respondernos asimismo: ¿Cuáles fueron las causas y errores del negativo escenario financiero del 2014? ¿Cuál es el precio financiero de la reestructuración laboral?, y, ¿Qué pasó con la reliquidación de las pensiones irregulares?  Sin duda, estamos ante el mito de los rectores financistas (hemos tenido 5 rectores economistas en 12 años, discontinuos), ¿por qué en ochos años no se pudo declarar a Uniatlántico como institución libre de riesgo financiero?

Los millonarios recursos que “ingresaran” por la cifra de “$300” mil millones de la acción de cumplimiento de la ASOJUA, tienen que fortalecer a los investigadores, docentes y estudiantes que esperamos como chiquillos en los tiempos de Papa Noé, para dotar a los obsoletos laboratorios y llenar de libros actualizados a las bibliotecas, la infraestructura tecnológica y literatura científica. También se debe financiar un plan de relevo generacional para enviar al exterior a sus semilleros y jóvenes talentos a prepararse como Magister y Doctores que provengan de las clases menos favorecidas de la provincia olvidada, con lo que se formarán los investigadores del siglo XXI para remplazar a la nómina de profesores con un alto porcentaje en edad de retiro forzoso. Ministra: tiene en sus manos la barcaza del buen gobierno para entregársela a un capitán de la ciencia, que la conduzca a la tierra prometida de la sociedad del conocimiento y lejos de la seudoacademia, clientelismo, politiquería; las malas costumbres según el filósofo francés Michael Foucault.  

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* Profesor titular de Uniatlántico y representante de los docentes investigadores ante el CIARP. Mg. en historia y candidato a doctor en Ciencias Humanas.