Un llamado de atención, con reflexión histórica, lanza a la Red Nacional de Pensionados de Colombia (RNPC), el avezado analista de la política pensional que rige en el país, Arnoldo Ramírez

--

Edición: Red Social El Satélite (RSS)

--

- En este momento –dice--, estamos ante la grave amenaza de las órdenes de la OCDE al presidente Santos, quien no dudará en recortar beneficios pensionales para congraciarse con los países ricos del mundo, buscando que Colombia pueda ingresar a ese grupo, sin importar la suerte de los colombianos. Posiblemente se gravarán las pensiones, se incrementará la edad y el tiempo de servicios para el reconocimiento de la pensión; se aumentarán las cotizaciones a pensiones y se disminuirá la mesada pensional…

-  Y todo pasará con el pueblo y los pensionados como testigos mudos del duro golpe, por la situación de narcosis mental en que los gamonales políticos mantienen al pueblo, como se reveló en las elecciones parlamentarias del 2014, en las cuales los pensionados siguieron las órdenes de los caudillos tradicionales y dieron la espalda a la honrosa candidata (Yolanda Salgado), que podía defender con tesón los derechos y los intereses de los pensionados.

Mirando atrás

Ramírez, valga resaltarlo, es de los pocos que aciertan al responsabilizar en primer lugar al expresidente César Gaviria del menoscabo social emprendido en su administración (1990-1994) contra los pensionados, al recortarles el incremento anual de las mesadas en proporción igual al salario mínimo que se estableciera para los trabajadores activos.

Y el apunte histórico es contundente:

… En 1988, bajo la administración del presidente Virgilio Barco (1986-1990), siendo ministro de Trabajo, Juan Martín Caicedo Ferrer, se impulsó la ley 71, la cual en su artículo 1º, ordenó incrementar las pensiones en el mismo porcentaje del SML, cada vez que se decretara el incremento de éste. Decía la norma:

"Las pensiones a que se refiere el artículo 1o. de la Ley 4a. de 1976, las de incapacidad permanente parcial y las compartidas, serán reajustadas de oficio cada vez y con el mismo porcentaje en que sea incrementado por el Gobierno el salario mínimo legal mensual.

PARAGRAFO. Este reajuste tendrá vigencia simultánea a la que se fija para el salario mínimo".

El revolcón

Poco les duró la dicha a los pensionados porque a los dos años llegó a la presidencia César Gaviria (1990-1994), con su gobierno de “El Revolcón” en el que tenía asiento de primera fila el nefasto ministro de Trabajo, Juan Luis Londoño, y se propuso, en la criminal ley 100 de 1993, con respecto al reajuste pensional, el artículo 14, que a la letra dice:

… “Con el objeto de que las pensiones de vejez o de jubilación, de invalidez y de sustitución o sobreviviente, en cualquiera de los dos regímenes del sistema general de pensiones, mantengan su poder adquisitivo constante, se reajustarán anualmente de oficio, el primero de enero de cada año, según la variación porcentual del Índice de Precios al Consumidor, certificado por el DANE para el año inmediatamente anterior. No obstante, las pensiones cuyo monto mensual sea igual al salario mínimo legal mensual vigente, serán reajustadas de oficio cada vez y con el mismo porcentaje en que se incremente dicho salario por el Gobierno".

Es en este momento que aparece el senador estrella del gobierno de Gaviria, Álvaro Uribe Vélez, brazo derecho del entonces precandidato presidencial, Ernesto Samper, quien funge, para el caso, como ponente de la devastadora (en términos sociales ),  ley 100.

De ahí en adelante, los pensionados han sido tratados como trapo de cocina, siendo el mismo Uribe, ya como Presidente, quien rematara la faena haciendo aprobar el acto legislativo 01 de 2005, mediante el cual se eliminó la mesada 14; se puso cortapisa al régimen de transición de la Ley 100 y se proscribió el respeto a los derechos pensionales adquiridos. En esta forma los pensionados posteriores a julio de 2005 perdieron la mesada 14, y en este año de gracia del 2015, se perdió el amparo del régimen de transición del artículo 36 de la Ley 100.

Conclusión

Al llamar la atención sobre la historia reciente del maltrato a los pensionados, el activista de la RNPC, Arnoldo Ramírez, alerta al gremio a defender esta vez con ahínco sus derechos económicos y sociales a través de una acción política contundente que pueda demostrar, como en su momento lo dijo el presidente Lincoln, que se puede engañar a algunos todo el tiempo pero no se puede engañar a todo el mundo todo el tiempo.